FRAN Y REME,UN CAMINO MARCADO POR UN SUEÑO-ACUARELA Nº204-GUACHE, LAPICES ACUARELABLES SOBRE PAPEL CANSON

Fran quedo deslumbrado ante el misterioso paisaje  que se mostraba   ante  sus ojos,  entre rayos de colores,la experiencia maravillosa de observar esa mezcla de luces .El amanecer se regalaba dulcemente ante el y marcial, su perro, que atemorizado se refugiaba cautelosamente entre sus brazos. La vida ahora era perfecta. Como un ángel guardián , la madre naturaleza le mostraba la importancia de  la belleza de los paisajes.En sus manos un precioso ramo de flores que ofrecía a las aguas  de un mar desconocido cuyas olas naufragaban ante la mirada emocionada  del niño . Las ramas de los árboles dibujaban sombras, que sinuosamente  se colaban por el cristal ,  bamboleándose  al compás del ritmo del viento, reflejando en la pared de la habitación movimientos .Entre sueños…Fran  escucho un llanto débil, saltó  de la cama  dirigiéndose lentamente medio adormilado por el largo pasillo de su casa, siguiendo los sonidos de ese llanto  silencioso y desgarrador. Se asomo por la rendija de la puerta y vio a su madre que repetía constantemente entre mares de lágrimas la frase «Nos quedamos en la calle¡¡Nos quitan el piso ¡¡Quiero morir¡ Fran asustado sin saber que hacer abrazo a su madre ,que hundió la cabeza entre su pecho respirando profundamente. Después sus miradas… se fundieron . En las pupilas de su hijo  vio todas las estrellas del cielo iluminando su presencia, los paisajes… las estaciones…las hojas del dorado otoño se posaban a sus  pies…¡tienes que vivir! susurraba la desconocida voz  de la  dama naturaleza, que  se acerco lentamente ofreciéndole un ramo de rosas ,con el nombre de Reme escrito en cada pétalo. Mientras en  televisión las noticias hablaban de economía y huelgas…Fran tomo de la mano a su madre que ahora sonreía, sus palabras sonaban en un idioma diferente .Vámonos de la ciudad hijo mío, solo tu has conseguido que  descubra el verdadero sentido de la vida. La calle estaba desierta y fría, los pasos de Reme  y Fran sonaron sordos.Al final de la calle un grupo de chicos y chicas bebían sin control, los villancicos seguían sonando, ahora coreados por una familia que ilusionada preparaba su cena de Navidad .Fran y Reme   sonreían ajenos a todo. Se pararon unos segundos mirando lo que dejaban atrás, continuaron su camino anulando  pensamientos… sin penas .Ahora solo tenían un presente , de ellos dependía subsistir, lo habían perdido todo y sin embargo sus miradas buscaban otros rumbos…Estuvieron todo un día caminando, al salir de la ciudad vieron asombrados …grandes masas de personas sin hogar, deambulando sin rumbo fijo ,esperando en la frontera de la vida, algún sueño que salvar de las injusticias de un mundo materialista . Reme se aferro fuertemente a la mano de su hijo sintiendo que había vuelto a nacer.   Elssa Ana